La Vicepresidente de la Fundación Hispano Británica, Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza, ha recibido la condecoración de MBE (Member of the British Empire) en un emotivo acto en la residencia del Embajador británico

Fotos: Juan Carlos Vega

La Vicepresidente de la Fundación Hispano Británica, Sonsoles Diez de Rivera y De Icaza, recibe la condecoración de Miembro Honorario de la Orden del Imperio británico (MBE) en un emotivo acto, “uno de los grandes momentos de mi vida,” en el que estuvo acompañada por SAR la Infanta Margarita de Borbón, familia, amigos, representantes de la FHB y de la embajada británica en Madrid.

Hugh Elliot, embajador británico en España, en nombre de la reina Isabel II que había concedido esta distinción, no ahorró cariño ni elogios a la labor de Sonsoles Diez de Rivera para promocionar la cultura británica en España deteniéndose en enumerar conciertos, conferencias, visitas y todo tipo de eventos culturales que nuestra vicepresidente ha promocionado desde que comenzara a colaborar con la Fundación “especialmente los primeros 20 años bajo la dirección pigmaliónica del entonces Presidente Embajador Felipe de la Morena.”

Hugh Elliot se dirigió a los asistentes a este acto de entrega en los salones de su residencia para hablar de ella afirmando que “durante casi 30 años, Sonsoles Diez de Rivera ha desempeñado una extraordinaria labor como Vicepresidenta Ejecutiva de la Fundación Hispano Británica, dedicando su tiempo y esfuerzo en aras de la promoción de las relaciones culturales hispano-británicas. Con su tiempo, su dedicación y su extensa red de amistades y contactos ha reforzado la presencia y el impacto de la FHB en este país, manteniendo una excelente relación con las instituciones españolas. Por todo ello, es un enorme placer otorgarle hoy este reconocimiento.”

Muy emocionada, nuestra vicepresidente aseguró que “nunca podría ni remotamente soñar con recibir un honor tan grande, y estoy profundamente conmovida e increíblemente agradecida.”

Al dirigirse a los asistentes con una reseña del trabajo por el que le han concedido la medalla que “nunca soñé haber merecido” explicó que “en el contexto de los círculos académicos, culturales y sociales españoles he tenido que competir con muchas organizaciones e instituciones bien establecidas, así como con grupos que representan los intereses de otros países. Madrid es la tercera ciudad más poblada de Europa, tanto en su término municipal como en su área metropolitana, y una ciudad que representa la segunda lengua más hablada de Occidente. El desafío de promover la cultura y la educación británicas en este entorno tenía que ser evidente para mí.”

«Nunca podría ni remotamente soñar con recibir un honor tan grande,

y estoy profundamente conmovida e increíblemente agradecida»

Las trayectoria profesional y personal de Sonsoles Diez de Rivera no puede separarse de la historia particular de la Fundación Hispano Británica. Más de veinticinco años de dedicación que se han plasmado en la organización de eventos de diversa naturaleza y tamaño, y algunos de considerable importancia. Estos últimos incluyen conciertos y cenas de gala a los que ha asistido la Realeza tanto británica como española, incluidos SAR el Príncipe de Gales, SAR la Duquesa de Cornualles, SAR la Princesa Alexandra, SM la Reina de España, SAR el Príncipe de Asturias y SAR la Infanta Margarita. Los conciertos han incluido a organizaciones británicas como la Academy of St Martin in the Fields y el Schubert Ensemble de Londres, para actuar ante el público español. Las cenas de gala han permitido homenajear a ilustres personalidades británicas y españolas. Las conferencias organizadas para académicos británicos visitantes que vienen a Madrid patrocinados por la Fundación para trabajar en la Universidad Complutense de Madrid han brindado a un público más amplio la oportunidad de escuchar acerca de importantes investigaciones británicas en una variedad de disciplinas académicas.

“Todos estos eventos, algunos grandes, otros pequeños, han puesto en el ámbito de los intereses culturales y educativos británicos, a ciudadanos españoles de diversa procedencia, profesional, educativa (incluyendo estudiantes), cultural, comercial y social. Intenté que la Fundación cubriera un área de la sociedad civil española a la que no llegan fácilmente las entidades oficiales británicas como la Embajada y el British Council.”

“Disfruté cada momento organizando todos estos eventos” aseguró destacando también en su intervención “mi agradecimiento a Su Majestad la difunta Reina Isabel y, en segundo lugar, a todos los miembros de la Fundación Hispano Británica que firmaron aquella carta sugiriendo que yo era merecedora de este gran honor ¿Qué dijeron que me halagaron tanto, que aquí estoy ahora abrumada y conmovida?. Gracias a todos por acompañarme hoy y compartir conmigo este maravilloso momento de mi vida.”