El museo recibe la colección de dibujos y óleos del conservador, muerto en 2020, y saca a subasta por 1,8 millones un inmueble cuyos ingresos destinarán a comprar obra
JAIME G.MORA
MADRID Actualizado:10/09/2021
Conservador del Museo del Prado desde 1980, gran especialista en la influencia del arte francés en España, el legado de Juan José Luna (Madrid, 1946-2020) va mucho más allá de su papel como jefe de Departamento en la pinacoteca más importante de España. A su muerte, en marzo del año pasado, el conservador dejó en manos del Prado su colección de arte, integrada por más de 700 dibujos y óleos, y una vivienda en el centro de Madrid que el museo sacará a subasta por expreso deseo de Luna. El Prado destinará el dinero que obtenga por el inmueble, una vivienda situada en el número 11 de la avenida Menéndez Pelayo, con vistas al parque del Retiro, a la compra de obra. Ya se ha abierto el plazo para presentar ofertas en una subasta que se celebrará en las dependencias de la pinacoteca el próximo 27 de octubre. El precio de salida: 1,8 millones de euros, que a buen seguro se incrementarán según vayan entrando ofertas. La vivienda, de más de 300 metros cuadrados, incluye también dos trasteros ubicados en la misma calle.
El acto de subasta servirá para volver a homenajear la figura de un hombre del Prado que también ha legado una rica colección de estampas, dibujos y fotografías. Según José Manuel Matilla, uno de los conservadores del museo que está analizando la colección donada por Luna, las estampas francesas de la segunda mitad del siglo XVII y del XVIII son las más destacadas de este grupo. Sobresalen aquí los retratos de personajes ilustres, entre ellos el de Charles Le Brun, o el ‘Adán y Eva a los pies de la Cruz’ de Claude Mellan. La colección incluye también «estampas de paisaje, mitología, modelos de academia para aprender a dibujar y de modelos con motivos decorativos susceptibles de ser empleados en artes suntuarias». Hay igualmente estampas italianas de entre los siglos XVII y XIX y algunas españolas. En cuanto a la colección de dibujos, Matilla apunta que es mucho más heterogénea. Son, en su mayoría, españoles, con una pequeña representación del siglo XVII –destaca uno atribuido a Antonio de Castillo– y del XVIII –obras de Vicente Mariani–, y otra más amplia del XIX. El conservador destaca dos de José Gutiérrez de la Vega, ‘La Magdalena penitente’ y ‘Caín y Abel’, así como obras de Ricardo de Villodas y Ricardo Verdugo Landi.
En total, el legado de Juan José Luna está conformado por un conjunto de 766 obras que ofrecen una muestra de la variedad de sus gustos e intereses. Doctor en Filosofía y Letras, era jefe del Departamento de Pintura del Siglo XVIII del Museo del Prado, con quien comenzó a colaborar en 1969. Fue en 1980 cuando ganó las oposiciones a conservador, y así comenzó una trayectoria profesional que lo llevó a comisariar exposiciones, a impartir clases en centros universitarios y a escribir una decena de libros y centenares de artículos de investigación. Luna era también académico numerario de la Real Academia de Doctores y académico correspondiente de la Real Academia de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. Asimismo, formó parte del Patronato del Museo Español de Arte Contemporáneo y de la Junta Superior de Museos de España. También estaba vinculado, en calidad de patrono, socio o vocal, con instituciones como la Real Fábrica de Vidrio y Cristal de La Granja, la Alliance Française de Madrid, la Fundación Hispano-Británica o el Centro de Estudios del Siglo XVIII.