Una familia inglesa ha desenterrado en su jardín un fabuloso tesoro: 63 monedas de oro y otra de plata de la dinastía Tudor. Algunas son piezas muy raras ya que llevan las iniciales de las tres primeras esposas de Enrique VIII.
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Abel de Médici
Diciembre 2020
El confinamiento a causa de la pandemia de COVID-19 ha proporcionado a algunas personas mucho tiempo libre para dedicarse a las labores domésticas, a veces con resultados sorprendentes. Es el caso de una familia de New Forest, en el sur de Inglaterra, que mientras arreglaba su jardín sacó a la luz un increíble tesoro: 64 monedas de época Tudor que abarcan desde el reinado de Eduardo IV (1461-1483) hasta el de Enrique VIII (1509-1547).
Se trata de 63 monedas de oro y una de plata cuyo valor total asciende a 24 libras de la época, que hoy en día equivaldrían a unos 15.000 euros, según los expertos. Una cantidad considerable que hace pensar a John Naylor, especialista en monedas del Ashmolean Museum, que fueron enterradas deliberadamente con la intención de recuperarlas después. “Entre finales de la década de 1530 y la de 1540 tuvo lugar la Disolución de los Monasterios [cuando Enrique VIII ordenó confiscar los bienes de la Iglesia en Inglaterra, Gales e Irlanda] y sabemos que algunas iglesias trataron de esconder su fortuna, con la esperanza de poder recuperarla a largo plazo”.
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Las piezas más raras son una serie de monedas de oro de la época de Enrique VIII que llevan las iniciales de sus tres primeras esposas: Catalina de Aragón (K), Ana Bolena (A) y Jane Seymour (I). Barrie Cook, un conservador de monedas del British Museum, afirma que incluir los nombres de sus mujeres fue “una decisión muy extraña y muy interesante” en el ámbito de la numismática, puesto que implicaba tener que acuñar nuevas monedas si se divorciaba de su esposa, la hacía ejecutar o esta moría de forma natural. Resulta interesante, además, que no se hayan encontrado piezas similares para las tres últimas esposas del rey: Ana de Cleves, Catalina Howard y Catalina Parr.
El tesoro está compuesto por 63 monedas de oro y una de plata. Las piezas más raras datan de la época de Enrique VIII y llevan las iniciales de sus tres primeras esposas.
Aparte de estas raras piezas, el grueso del tesoro está formado por “ángeles”, un tipo de monedas de uso común en Francia e Inglaterra a finales de la Edad Media. Su nombre proviene de la imagen del reverso, que representa al arcángel Miguel matando a un dragón, y según Cook “eran las monedas de oro más habituales a finales de la época medieval y principios de la moderna”.