TERESA PALAZUELO
MI AMIGA
OBITUARIO
SONSOLES DIEZ DE RIVERA
Vicepresidente de la Fundación Hispano Británico
Elegancia, Cultura, Clase, Inteligencia, Discreción, Artista, Creadora de Belleza, Políglota, educada en Austria e Inglaterra, en resumen, una Señora en toda la extensión de la palabra, eso es Teresa Palazuelo.
En su profesión como creadora de moda tuvo un enorme éxito, especialmente en sus trajes de novia, creaciones que, en su época, fueron rompedoras, con utilizaciones de unos diseños impecables, unas telas de una calidad insuperable, fueran de origen o como cuando eran pintadas o trabajadas artesanalmente. Su legado queda para la posteridad con varias creaciones suyas en el Museo del Traje de Madrid (Juan de Herrera, 2).
Las clientas venían de toda Europa y América a que las vistiese en su taller, y el éxito era clamoroso. Sus modelos eran publicados en las mejores revistas de moda. Ella rara vez aparecía en ellas con entrevistas, dada su discreción ya que no quería hablar de sus importantes clientas, muchas de las cuales eran de la alta sociedad, pero también de familias reales. Tampoco quería hablar de su vida privada, que especialmente quería guardar para sí.
Teresa Palazuelo se exigía la perfección, tanto en su vida privada como en la amistad y en su profesión, cosa que se traducía en lo perfecto de sus creaciones. Era una amante de la música clásica y de la ópera, apasionada del arte contemporáneo y de la belleza en lo cotidiano, también en su trabajo.
Su discreción era total, jamás hablaba de su éxito, que era indiscutible, siempre procuró comportarse con un nivel bajo en cuanto a su difusión personal en los medios, sus creaciones tan bellas y perfectas eran las que hablaban por ella y se difundían solas.
Su marido, Ian Triay (Amigo de la Fundación Hispano Británica, fue durante años miembro del Comité Ejecutivo), y sus hijos han tenido el privilegio de disfrutar de una esposa y madre singular y admirable a lo largo de todos los aspectos de su vida y yo he tenido la suerte y el honor de que me admitiese en su amistad y siempre con una cercanía y cariño que, para mí, era un regalo muy especial.
Tengo una gran admiración por ella, como amiga, y como la gran mujer y artista que es y siempre lo será para todos los que la conocían y para todos los que disfrutaron de su amistad y arte.